Brutal agresión a un hombre de 78 años en Ruta 26: la Policía atrapó al violento, pero la Justicia lo dejó libre

La indignación volvió a hacerse notar en la provincia por una decisión judicial que muchos califican de incomprensible. Hilario, un jubilado de 78 años, fue víctima de una brutal agresión en la Ruta 26, a la altura del barrio Las Tunas, tras un incidente vial. Aunque el atacante fue detenido por la Policía, la Justicia ordenó su libertad poco después, lo que despertó el repudio de familiares y vecinos.

Según el relato de la familia, el agresor atacó a golpes de puño y también con una herramienta que sacó del baúl de la moto, cuando la víctima ya no estaba en condiciones de defenderse. Hilario terminó inconsciente y con lesiones graves en el rostro.

Pablo, hijo de la víctima dialogó con Multivisión Federal, y visiblemente indignado dijo que "una hora después de la golpiza, liberaron al agresor”. “Esto fue un intento de homicidio, lo molió a piñas, sacó una llave de la moto y le pegó con eso. Todo el tiempo repetía que lo iba a matar”, agregó.

En un testimonio directo y contundente, Hilario —aun convaleciente— relató su versión de los hechos: “Me duele todo el cuerpo, desde la cara hasta las piernas”, contó. “Me gritaba todo el tiempo que me iba a matar”, añadió, y describió cómo se desencadenó la agresión.

El jubilado también relató la continuidad del ataque que vino acompañao de varios amenazas e insultos, "abrió la camioneta, se subió y se cansó de pegarme”, afirmó Hilario, dando detalles que reafirman la versión de una golpiza prolongada y con intención claramente agresiva.

Pablo cuestionó además el accionar policial: “La Policía de Pinares no llamó nunca a la ambulancia. Fue gente del lugar la que se organizó para trasladarlo, mientras mi papá estaba al borde de la muerte”, dijo, asegurando que la asistencia médica no fue inmediata.

La familia y la comunidad exigen ahora que el caso sea revisado con celeridad y que la Justicia tome medidas que garanticen protección y sanciones ejemplares. “Queremos justicia, porque si lo dejan libre así como si nada, la próxima vez sí puede matar a alguien”, advirtió Pablo. Lo más preocupante es que familiares y amigos del violento continúan amenazando a Hilario y su familia: "tenemos miedo de lo que pueda pasarnos a cualquiera en casa".

Las autoridades locales todavía no brindaron una explicación pública sobre las razones de la liberación del agresor. El hospital San Bernardo confirmó que Hilario continúa internado y que su estado, aunque estable, reviste gravedad por las heridas recibidas en la cabeza y el rostro. La causa quedó en manos de la fiscalía, que deberá determinar responsabilidades y evaluar las medidas procesales correspondientes.