Presuntos sicarios bolivianos fueron capturados en el norte salteño

Dos hombres, de 21 y 34 años, oriundos del vecino país de Bolivia fueron capturados por policías salteños. Están acusados de formar parte de una organización transnacional dedicada a perpetrar distintos delitos. Junto a otros tres hombres que siguen prófugos, tenían pedido de captura internacional.

Los sujetos capturados están domiciliados en la ciudad fronteriza de Salvador Mazza, sin embargo son de Bolivia. Al momento de ser interceptados por policías salteños dieron nombres falsos y tras consultar con sus pares de Bolivia saltó que se trata de dos de un grupo de cincos sujetos con pedido de captura internacional, entre otros delitos están acusados de asesinar a un joven de 19 años en Yacuiba, Bolivia.

En la madrugada del 3 de septiembre del año pasado secuestraron a dos jóvenes amigos, a quienes torturaron y flagelaron de una manera brutal. Uno de ellos, Brandón Beltrán, al cabo de algunas horas y mientras era trasladado al hospital perdió la vida. Su amigo logró escapar herido como estaba y salvó su vida de milagro.

Sindicados como sicarios en el vecino país y traficantes de estupefacientes en Argentina, el procedimiento que arrojó la detención de los acusados se produjo el 15 de septiembre en Pichanal, luego de acciones previas efectuadas por la División de Investigaciones Complejas contra la Narcocriminalidad de la Policía de Salta.

Con pruebas fehacientes colectadas a través de vigilancias, intervenciones telefónicas y otras tareas de inteligencia los sabuesos norteños confirmaron que los sospechosos tenían como modus operandi salir de la localidad de Aguaray con destino al sur del país.

El viernes 15 de septiembre, por la tarde, interceptaron a los prófugos en el cruce de Pichanal. Iban a bordo de un Peugeot 203 color gris y de una moto Rauser color blanco. Al peritar los rodados descubrieron que la moto tenía un desperfecto en la zona del motor, y adentro había paquetes con droga.

Luego de desentrañar la identidad de los hombres, Piter Rivas Bejarano (34) y Luis Angel Puma (21), los policías decidieron trasladarlos a la localidad de General Güemes para alejarlos de la zona de frontera, al parecer se había iniciado un plan para rescatar a los acusados.

Con la peligrosidad que implica tener a delincuentes de este calibre en dependencias policiales, recién 15 días después salió la orden de enviarlos a una cárcel.

Los otros tres hombres que siguen prófugos y con pedido de captura internacional son: Juan Rodas, Alexander Clemente y Alexander Vera. Junto a los dos detenidos en el norte salteño están acusados de asesinar y conformar una organización criminal.

Lo secuestrado el 15 de septiembre en Pichanal fueron tres envoltorios tipo “ladrillos” con más de 3 kilos de una sustancia amarillenta granulada, según los peritos de Drogas Peligrosas se trata de un derivado de la cocaína (pasta base). Desde la Fiscalía federal y el Juzgado federal intervinientes ordenaron el secuestro de la droga, también de los vehículos, un auto y una moto, y dinero en efectivo: más de 250 mil pesos, 1.400 pesos bolivianos y 20 dólares.