Quiénes eran los tres andinistas argentinos que murieron en Chile

Personal del Grupo de Operaciones Policiales de Carabineros (GOPE) confirmó que los tres cuerpos del grupo de andinistas argentinos fueron divisados desde el aire en un helicóptero que se encontraba sobrevolando un sector del Cerro. Los restos encontrados corresponden a Raúl Espir, Ignacio Lucero y Sergio Berardo.

El 22 de noviembre habían decidido comenzar una expedición con el objetivo de llegar a la cumbre del cerro Marmolejo, un volcán de más de 6000 metros de altura. Si bien su descenso estaba pautado para el jueves pasado, desde el miércoles 29 de noviembre no había noticias de ellos y fueron reportados como desaparecidos.

Este lunes por la mañana el Servicio Nacional de Prevención y Desastre (SENAPRED) había anunciado que se habían iniciado labores de descenso que culminaron con el hallazgo. A través de redes sociales se comunicó que se estaban llevando a cabo todos los trabajos para su extracción.

Quiénes eran los andinistas que fallecieron en el cerro Marmolejo

Raúl Espir era el intendente de General San Martín, cargo que había asumido en el año 2019 y del que había conseguido la reelección este año con el 63% de los votos. El hombre de 55 años pertenecía a Juntos por el Cambio y previo a dedicarse al ámbito político se desempeñaba como farmacéutico.

Su hija Agostina compartió en redes sociales un posteo que reza: “Vamos Pa, en lo más profundo de mi corazón sé que estás haciendo todo para poder salir, que los tres juntos van a salir. Te amamos”. Asimismo agradeció el mensaje de la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel, donde pedía ayuda a Gabriel Boric. En el texto le escribió al mandatario chileno y a la Ministra de Defensa Maya Fernández para rescatar a los andinistas argentinos.

Sergio Daniel Berardo trabajaba como escribano de esa misma localidad pampeana. En la página web de la empresa de Lucero había escrito: “Con Nacho ya hemos hecho seis expediciones, y vamos por más. Sus más de 40 cumbres en el Aconcagua lo dicen todo. Personalmente, me siento seguro transitando por la montaña con Nacho, porque desde los 13 años que sube montañas y su vasta experiencia y profesionalismo es el sello principal de su trabajo. Aparte, es un aventurero nato”.

Según trascendió, tanto Espir como Ignacio Lucero habían tenido experiencias previas en andinismo, pero el mendocino llevaba en su haber más de 30 años de trayectoria en el sector. Sus experiencias previas incluían 46 ascensos al Aconcagua y había sufrido un infarto masivo a 7.400 metros de altura en Nepal en 2011 mientras intentaba hacer cumbre en el Manaslu, en la cordillera del Himalaya.

Este accidente lo llevó a un largo proceso de recuperación que incluyó rehabilitación para recuperar el habla y lo sumergió en una depresión. Su historia de vida era difundida por él mismo a través de redes sociales, medios de comunicación y charlas TED.